(Foto: Ramón Hurtado/Trabajadoras sexuales y transexuales)
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Fuente: El Sol de Tijuana (Tijuana, Baja California, México)-.
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TIJUANA, Baja California-. Decenas de trabajadoras sexuales y transexuales que laboran en la zona de tolerancia de la ciudad han sido víctimas de extorsión por parte de inspectores de regulación municipal, lo que genera un problema de salud pública al dejarlas operar sin tarjeta sanitaria.
El círculo de corrupción que hay en la Dirección de Verificación y Regulación municipal, dependencia a cargo de Enrique González Ríos, está fuera de control, afirmó Víctor Clark Alfaro, director de la Centro Binacional de los Derechos Humanos.
Las sexoservidoras son extorsionadas por elementos de la dirección de inspección de regulación municipal por no contar con su tarjeta de sanitaria, con lo que se fomentan las enfermedades de transmisión sexual, señaló Víctor Clark Alfaro.
En entrevista, el antropólogo Clark Alfaro denunció que a las trabajadoras de la zona de tolerancia que no cuentan con tarjeta sanitaria se les requiere de 200 a 400 pesos para seguir trabajando.
"Las que han sido víctimas de extorsión prefieren pagar a los inspectores que ir a la dirección de servicios médicos municipales a solicitar su tarjeta ante los elevados costos", aseguró el director del CBDH.
Estas irregularidades hacen latente que las enfermedades de transmisión sexual se adquieran en la zona de tolerancia, todo generado por la corrupción que hay en la Dirección de Verificación y Regulación municipal.
Vanguardia de Mujeres Libres María Magdalena, asociación que aglutina a las sexoservidoras de la localidad, ha invitado en dos ocasiones al titular de Verificación y Regulación municipal a una reunión para exponer el caso y las ha desairado.
Sin embargo, la misma asociación de mujeres sexoservidoras y transexuales han expuesto dicha situación ante autoridades de Servicios Médicos municipales y Desarrollo Social.
La dirección de servicios médicos municipales tiene un registro de mil 700 sexoservidoras en la zona de tolerancia, pero se estima que son más de 5 mil las que operan en la ciudad, así como 20 transexuales y se cree que hay cerca de un centenar operando.
Los índices de corrupción que hay al interior de la dirección que preside Enrique González Ríos, está generando un problema de salud que podría salir de las manos y traer consigo consecuencias graves, reiteró Clark Alfaro.
De igual manera, indicó que el problema puede ir en incremento si los titulares de Servicios Médicos municipales y Desarrollo Social no ponen un freno a la impunidad con que operan los inspectores de regulación.
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