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Organizaciones y entidades en defensa de los derechos de transexuales, lesbianas y gays declaran a región de Valparaíso como zona peligrosa para Transexuales y Transgéneros. Llaman a organizaciones de minorías sexuales a enviar cartas de repudio a la Cancillería chilena y la intendencia.
Piden a transexuales y transgéneros que no visiten la Región de Valparaíso hasta que las autoridades den garantías concretas de que los atropellos serán prevenidos y no quedarán impunes.
Se anexa carta tipo que debe ser enviada a las autoridades chilenas
Movilh-. A raíz de los constantes ataques contra la población transexual y transgénero en la Quinta Región, esta zona central de Chile fue declarada como altamente peligrosa para este sector de la población por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), la Asociación Internacional de Derechos Humanos para Gays y Lesbianas (IGLHRC) y Carlaantonelli.com (el portal trans de habla hispana más importante del mundo), TravesNavia, la Organización de Transexuales por la Dignidad de la Diversidad y Estruturação - Grupo LGBT de Brasil. Asociación de Identidad de Género de Andalucía, Afirmación Chile, Afirmación Valparaíso, Vox Asociación civil de Argentina, GTTB Temuco y de Chile.
Por ello, los grupos enunciados llamaron a las organizaciones de derechos humanos de minorías sexuales de todo el mundo para que informen a la población transexual sobre el peligro que reviste vivir o visitar la Región de Valparaíso, donde todos los delitos padecidos por trans han quedado impunes y/o han recibido condenas que no están a la altura de los graves atropellos vinculados directa o indirectamente con la transfobia.
De igual manera, pidieron a las organizaciones de minorías sexuales que envíen una carta a la Cancillería chilena y a la intendencia de la Quinta Región, repudiando la vulnerabilidad de la población transexual en esa zona exigiendo medidas para combatir la transfobia.
La misiva, cuya carta tipo se expone abajo, debe ser enviada a las siguientes personas: Señor Roberto Matus Harris (rmatus@minrel.gov.cl ), jefe de gabinete del canciller Alejandro Foxley; director de Derechos Humanos de la Cancillería, Juan Anibal Barría (jbarria@minrel.gov.cl ), intendente de Valparaíso, Iván de la Maza (marta.toledo@gorevalparaiso.cl ) y embajadores chilenos ante los respectivos países.
LA GRAVE SITUACIÓN DE VALPARAISO
Las organizaciones chilenas de minorías sexuales han denunciado en reiteradas ocasiones a las autoridades de la Región de Valparaíso sobre los atropellos a las trans, pero jamás han recibido respuestas satisfactorias y definitivas para combatir la gran vulnerabilidad social que afecta a este sector de la población.
De acuerdo a los Informes Anuales de Derechos Humanos elaborados por el Movilh, desde el 2002 a la fecha se han registrado sólo en la Región Valparaíso 18 ataques severos que han dejado a punto de perder la vida a personas transexuales, mientras que otras cuatro han muerto en violentos asesinatos. Del total nacional de asesinatos contra transexuales en esas fechas, la Quinta Región contiene el 57 por ciento, mientras que del total de ataques perpetrados por civiles, el 50 por ciento
Estos atropellos, que se han concentrado en diversas localidades de la Región, como Valparaíso, Viña del Mar, Los Andes, Quillota, Papudo y San Felipe; ameritan iniciar una campaña de prevención que alerte a la población trans sobre los peligros que viven en la zona, en especial al considerar que grupos autoidentificado como neoanazis se han jactado públicamente de promover el odio contra las minorías sexuales.
Al respecto las minorías sexuales organizadas calificaron de “vergonzoso para un país que se jacta de democrático tener que alertar sobre un fenómeno que pone en riesgo la vida de un sector de la población por el sólo hecho de desenvolverse en ambientes peligrosos a raíz de la gran vulnerabilidad social que padecen y que las autoridades no han atendido con eficiencia”
Sin embargo, conscientes de que “la población transexual, no puede seguir esperando un segundo más, porque en un segundo, como se ha visto, pueden perder la vida”, es que decidieron iniciar la campaña pública de alerta.
CARTA A AUTORIDADES CHILENASA continuación se reproduce la carta que pide a las organizaciones de minorías sexuales envíen a las autoridades chilenas. La misiva debe ir con el nombre, teléfono, dirección y correo de la organización que la suscriba y se debe enviar con copia a movilh@movilh.cl
Señor Roberto Matus Harris (rmatus@minrel.gov.cl ) / Jefe de gabinete del canciller Alejandro Foxley
Señor Juan Anibal Barría (jbarria@minrel.gov.cl ) / Director de Derechos Humanos de la Cancillería
Señor Intendente Quinta Región / Iván de la Maza (marta.toledo@gorevalparaiso.cl )
La organización abajo firmante expresa a usted nuestra total preocupación por los violentos atropellos que han padecido transexuales y transgéneros en la Región de Valparaíso, traducidos en cuatro asesinatos y 18 severas golpizas ocurridas sólo entre el 2002 y la fecha.
Del total de asesinatos a nivel nacional, la Quinta Región contiene el 57 por ciento y del total de ataques perpetrados por civiles, el 50 por ciento.
En Valparaíso la población transexual principalmente afectada es aquella que ejerce un obligado comercio sexual, única fuente laboral que en la actualidad la sociedad chilena ha permitido a este sector de la población ejercer.
Las transexuales y transgéneros en la mayoría de las ocasiones son atacadas o asesinadas en razón de su identidad de género, mientras en otros casos los atropellos han sido resultado del ambiente peligroso en el cual se desenvuelven (el comercio sexual) por obligación.
Lo que la autoridades chilenas y la sociedad en general deben comprender es que en ambos casos incide la transfobia, pues es precisamente la vulnerabilidad social la que desencadena que este grupo humano no tenga posibilidades de desarrollo, debiendo en muchas ocasiones lidiar con ambientes hostiles y vinculados a la delincuencia.
Por su lado, las autoridades y las fiscalías de la Región de Valparaíso no han implementando planes integrales para sancionar a los responsables de la transfobia y entregar a las transexuales herramientas básicas que les permitan elevar su calidad de vida, pese a los continuas llamados y denuncias de las organizaciones chilenas de minorías sexuales.
Uno de los casos más dramáticos ocurre cuando personas transexuales fichadas por algún delito, los cuales ocurren en cualquier sector de la población, desisten no sólo de iniciar acciones legales contra los responsables de los atropellos, sino que además se escapan de los recintos asistenciales para recibir la adecuada atención médica.
Así es como resulta vergonzoso para Chile que este mes la transexual Karen Rojas Araya (42) escapara de un centro asistencial de la Quinta Región tras recibir un balazo en una riña común, sólo porque tenía antecedentes previos.
Ello ocurre, simple y llanamente, porque la gran vulnerabilidad padecida por las trans; y su respectiva desconfianza en un accionar justo de las autoridades; las lleva a poner en riesgo su propia vida por temor a represalias que pueden ser más graves.
Informamos a las autoridades chilenas que hemos decidido, junto a otras organizaciones de minorías sexuales, alertar a las transexuales del mundo sobre el peligro que reviste para ellas vivir o visitar la Región de Valparaíso, en especial al considerar el violento accionar de grupos en la zona que han sido identificados como neonazis en sus ataques a diversas minorías.
También pedimos que se implementen en breve las medidas de seguridad y prevención necesarias para asegurar la vida y la integridad física y psíquica de la población transexual de la Región.
Sostener que en algunos casos, los menores, las transexuales son atacadas en el marco de delitos comunes, es una distorsión de la realidad que limita los verdaderos alcances de la vulnerabilidad social de este sector, el cual al contar con políticas públicas que garanticen su desarrollo, mejoraría su calidad de vida, toda vez que dispondría de espacios seguros donde desenvolverse.
Toda persona, al margen de su identidad de género, oficio o faltas, merece respeto y ser atendida por las políticas públicas en igualdad de condiciones.
