El Nuevo Herald - The Miami Herald (Miami/Broward)-.
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Una niña que va a empezar en el kindergarten en Broward en el próximo otoño en realidad es un niño.
Pocos van a saber ese detalle genético, porque los padres del niño de 5 años y los administradores escolares han acordado que es mejor que pase por niña.
Especialistas han diagnosticado que Pat (nombre ficticio) padece de disforia (descontento) de género, una condición con la cual la persona cree que pertenece al sexo opuesto. Luego de dos años de pruebas se ha determinado que el niño no es simplemente afeminado o pasa por una etapa.
''La disforia de género puede ocurrir durante el desarrollo del feto en el útero'', indicó la notable especialista y sexóloga Marilyn Volker Ph.D., de Miami.
Aunque el niño probablemente sea el menor transexual más joven admitido a una escuela del sur de la Florida, no es el único. Los sistemas escolares de Broward y Miami-Dade tienen normas establecidas para facilitarles las cosas a niños similares y a sus familias.
La organización Equality Florida, que aboga por las comunidades homosexuales, lesbianas y transexuales de la Florida, y la PFLAG (Padres, Familiares y Amigos de Lesbianas y Gays) dicen que ambos distritos escolares tienen la política más progresista de todo el estado.
Broward y Miami-Dade están entre los distritos escolares más ejemplares ''cuando se trata de los derechos de personas transexuales'', indicó Tobias Packer, organizador de Equality Florida en el sur del estado, que es transexual.
Carole Benowitz, coordinadora de PFLAG en la Florida que tiene un hijo homosexual, se muestra de acuerdo.
Benowitz dice que hace dos años, la llamaron de una secundaria de Broward que no nombró porque un grupo de chicos golpeó a otro al que consideraban afeminado. En realidad la víctima era transexual, una chica que parece, se viste y se comporta como un varón.
Acudieron a Benowitz para que asesorara a los administradores, a los estudiantes y a la víctima.
''La gente entiende lo que es ser homosexual o lesbiana, pero cuando oye que hay personas que pertenecen genéticamente a un género pero viven como el opuesto, muchos se sienten amenazados porque no lo entienden'', comentó Benowitz. ``Y esa falta de entendimiento puede hacerles la vida muy difícil a esos niños y a sus padres''.
''Además de comportarse como el sexo opuesto, las personas con disforia de género se identifican con el sexo opuesto'', aseguró Volker. ``Y tienen una constante incomodidad con sus partes y genitales externos porque no se ajustan a su identidad sexual interna. Han nacido con el cuerpo erróneo''.
El niño que va a ingresar próximamente al kindergarten parece muy femenino cuando retoza en el patio y juega con muñecas. Pat dice que detesta sus genitales y se niega a ponerse ropa de varón.
El y sus hermanos mayores (dos hermanas y un hermano) viven en un vecindario de clase media de Broward con su padre, que es abogado, y su madre, que tiene una maestría en consejería.
Ellos nunca habían oído hablar de disforia de género hasta que llevaron a su hijo a recibir tratamiento. El insistía en que era una niña y trataba de ocultar su pene entre las piernas.
Luego de muchas consultas con un grupo de endocrinólogos y terapeutas pediátricos, y después con funcionarios escolares, los padres decidieron que sería mejor para Pat vivir como si fuera una niña.
''Los funcionarios escolares han accedido a seguir colaborando con la familia y los especialistas para ayudar a crear un medio ambiente que pueda optimizar la capacidad del niño de aprender y crecer dentro del sistema escolar'', declaró Karen Doering, abogada de la familia, que se especializa en defender los derechos de personas transexuales, homosexuales, bisexuales o lesbianas.
La disforia de género, llamada trastorno de identidad sexual por la Asociación Siquiátrica de Estados Unidos (APA) todavía no es bien entendida, como ocurría con la homosexualidad hace 50 años.(*1)
Aunque la APA no ha adoptado una posición formal al respecto, la comunidad científica cada vez se aproxima más a determinar que podría ser una condición genética y no un trastorno mental.(*1-Bis)
En la escuela, los maestros y la directora están preparados. El niño utilizará baños para el uso de ambos sexos, se le llamará por un nombre ''unisex'', que se puede usar también para personas de ambos sexos (no es Pat), y se le ha pedido que se vista con ropa neutral, como por ejemplo pantalones cortos y camisas.
Los funcionarios escolares indicaron que es práctica común en Broward y en Miami-Dade ayudar a niños transexuales a desenvolverse.
''Las normas establecidas por los distritos escolares son progresistas'', señaló Benowitz. ``Los dos condados quieren garantizar que los estudiantes transexuales reciban el mismo trato que los demás, y actúan directamente cuando ocurren malentendidos o incidentes violentos''.
Leah Kelly, directora de servicios de apoyo estudiantil y educación de niños excepcionales del sistema escolar de Broward, no puede hacer comentarios sobre casos específicos.
``Pero sí diré que el sistema escolar de Broward ha admitido antes a niños transexuales, y que es un asunto privado entre los padres, los administradores escolares y el niño''.
Kelly dice que la discreción juega un papel en la protección de niños transexuales y la privacidad de los padres. Según ella, el objetivo es que los niños se integren.
Tony Valido, especialista en la División de Servicios Estudiantiles del sistema escolar de Miami-Dade, dice que el sistema de este condado para ayudar a esos niños va más allá, porque la necesidad es mayor.
''A diferencia de Broward, Miami-Dade tiene una población estudiantil más diversa'', dice Valido, ``especialmente en la secundaria, donde hay cierto número de adolescentes abiertamente transexuales, en la mayoría varones que creen que son chicas''.
Todas las secundarias de Miami-Dade tiene una Sexual Minority Network (Red Minoritaria Sexual) a la cual pueden acudir los alumnos homosexuales, lesbianas, bisexuales o transexuales, con consejeros o maestros que les ayudan.
Eso significa aportar consejos para que los alumnos puedan sentirse parte del grupo y se entiendan mejor a sí mismos, dice Valido, que añade que no ha habido incidentes de violencia ni maltrato.
El sistema ha existido desde hace por lo menos 15 años. Valido dice que en años recientes, los estudiantes de minorías sexuales se han estado expresando más.
''Los alumnos de minorías sexuales se están manifestando cada vez más jóvenes, a veces hasta de 10 años de edad'', dice Valido, que espera que las redes minoritarias se extenderán también a las escuelas intermedias para el año que viene.
No se sabe con claridad cuántos estudiantes transexuales hay en el sistema.
El Departamento de Educación de EEUU no mantiene estadísticas de ese tipo, y no se les pide a las escuelas que lo reporten.
Los padres de algunos niños transexuales temen que el rechazo social, el temor y la hostilidad podrían dar lugar a que alguien llame a alguna agencia de servicios, como el Departamento de Niños y Familias (DFC) de la Florida. Hay quienes temen que una queja de que alguien está mandando a un niño a la escuela vestido de niña pueda dar lugar a acusaciones de maltrato o negligencia.
Según dice Abbie Cuéllar, una abogada que se especializa en cuestiones de bienestar infantil, esos temores son realistas.
''Los padres deben asegurarse de que la documentación pertinente al hijo esté disponible y actualizada'', dice Cuéllar. ``La disforia de género está muy mal comprendida, y sólo haría falta que una persona ignorante, aunque bien intencionada, empezara a hacer llamadas''.
Pero Gary Gershowitz, un portavoz del DCF en Tallahassee, dice que los padres de hijos transexuales en la Florida no tienen nada que temer.
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Una niña que va a empezar en el kindergarten en Broward en el próximo otoño en realidad es un niño.
Pocos van a saber ese detalle genético, porque los padres del niño de 5 años y los administradores escolares han acordado que es mejor que pase por niña.
Especialistas han diagnosticado que Pat (nombre ficticio) padece de disforia (descontento) de género, una condición con la cual la persona cree que pertenece al sexo opuesto. Luego de dos años de pruebas se ha determinado que el niño no es simplemente afeminado o pasa por una etapa.
''La disforia de género puede ocurrir durante el desarrollo del feto en el útero'', indicó la notable especialista y sexóloga Marilyn Volker Ph.D., de Miami.
Aunque el niño probablemente sea el menor transexual más joven admitido a una escuela del sur de la Florida, no es el único. Los sistemas escolares de Broward y Miami-Dade tienen normas establecidas para facilitarles las cosas a niños similares y a sus familias.
La organización Equality Florida, que aboga por las comunidades homosexuales, lesbianas y transexuales de la Florida, y la PFLAG (Padres, Familiares y Amigos de Lesbianas y Gays) dicen que ambos distritos escolares tienen la política más progresista de todo el estado.
Broward y Miami-Dade están entre los distritos escolares más ejemplares ''cuando se trata de los derechos de personas transexuales'', indicó Tobias Packer, organizador de Equality Florida en el sur del estado, que es transexual.
Carole Benowitz, coordinadora de PFLAG en la Florida que tiene un hijo homosexual, se muestra de acuerdo.
Benowitz dice que hace dos años, la llamaron de una secundaria de Broward que no nombró porque un grupo de chicos golpeó a otro al que consideraban afeminado. En realidad la víctima era transexual, una chica que parece, se viste y se comporta como un varón.
Acudieron a Benowitz para que asesorara a los administradores, a los estudiantes y a la víctima.
''La gente entiende lo que es ser homosexual o lesbiana, pero cuando oye que hay personas que pertenecen genéticamente a un género pero viven como el opuesto, muchos se sienten amenazados porque no lo entienden'', comentó Benowitz. ``Y esa falta de entendimiento puede hacerles la vida muy difícil a esos niños y a sus padres''.
''Además de comportarse como el sexo opuesto, las personas con disforia de género se identifican con el sexo opuesto'', aseguró Volker. ``Y tienen una constante incomodidad con sus partes y genitales externos porque no se ajustan a su identidad sexual interna. Han nacido con el cuerpo erróneo''.
El niño que va a ingresar próximamente al kindergarten parece muy femenino cuando retoza en el patio y juega con muñecas. Pat dice que detesta sus genitales y se niega a ponerse ropa de varón.
El y sus hermanos mayores (dos hermanas y un hermano) viven en un vecindario de clase media de Broward con su padre, que es abogado, y su madre, que tiene una maestría en consejería.
Ellos nunca habían oído hablar de disforia de género hasta que llevaron a su hijo a recibir tratamiento. El insistía en que era una niña y trataba de ocultar su pene entre las piernas.
Luego de muchas consultas con un grupo de endocrinólogos y terapeutas pediátricos, y después con funcionarios escolares, los padres decidieron que sería mejor para Pat vivir como si fuera una niña.
''Los funcionarios escolares han accedido a seguir colaborando con la familia y los especialistas para ayudar a crear un medio ambiente que pueda optimizar la capacidad del niño de aprender y crecer dentro del sistema escolar'', declaró Karen Doering, abogada de la familia, que se especializa en defender los derechos de personas transexuales, homosexuales, bisexuales o lesbianas.
La disforia de género, llamada trastorno de identidad sexual por la Asociación Siquiátrica de Estados Unidos (APA) todavía no es bien entendida, como ocurría con la homosexualidad hace 50 años.(*1)
Aunque la APA no ha adoptado una posición formal al respecto, la comunidad científica cada vez se aproxima más a determinar que podría ser una condición genética y no un trastorno mental.(*1-Bis)
En la escuela, los maestros y la directora están preparados. El niño utilizará baños para el uso de ambos sexos, se le llamará por un nombre ''unisex'', que se puede usar también para personas de ambos sexos (no es Pat), y se le ha pedido que se vista con ropa neutral, como por ejemplo pantalones cortos y camisas.
Los funcionarios escolares indicaron que es práctica común en Broward y en Miami-Dade ayudar a niños transexuales a desenvolverse.
''Las normas establecidas por los distritos escolares son progresistas'', señaló Benowitz. ``Los dos condados quieren garantizar que los estudiantes transexuales reciban el mismo trato que los demás, y actúan directamente cuando ocurren malentendidos o incidentes violentos''.
Leah Kelly, directora de servicios de apoyo estudiantil y educación de niños excepcionales del sistema escolar de Broward, no puede hacer comentarios sobre casos específicos.
``Pero sí diré que el sistema escolar de Broward ha admitido antes a niños transexuales, y que es un asunto privado entre los padres, los administradores escolares y el niño''.
Kelly dice que la discreción juega un papel en la protección de niños transexuales y la privacidad de los padres. Según ella, el objetivo es que los niños se integren.
Tony Valido, especialista en la División de Servicios Estudiantiles del sistema escolar de Miami-Dade, dice que el sistema de este condado para ayudar a esos niños va más allá, porque la necesidad es mayor.
''A diferencia de Broward, Miami-Dade tiene una población estudiantil más diversa'', dice Valido, ``especialmente en la secundaria, donde hay cierto número de adolescentes abiertamente transexuales, en la mayoría varones que creen que son chicas''.
Todas las secundarias de Miami-Dade tiene una Sexual Minority Network (Red Minoritaria Sexual) a la cual pueden acudir los alumnos homosexuales, lesbianas, bisexuales o transexuales, con consejeros o maestros que les ayudan.
Eso significa aportar consejos para que los alumnos puedan sentirse parte del grupo y se entiendan mejor a sí mismos, dice Valido, que añade que no ha habido incidentes de violencia ni maltrato.
El sistema ha existido desde hace por lo menos 15 años. Valido dice que en años recientes, los estudiantes de minorías sexuales se han estado expresando más.
''Los alumnos de minorías sexuales se están manifestando cada vez más jóvenes, a veces hasta de 10 años de edad'', dice Valido, que espera que las redes minoritarias se extenderán también a las escuelas intermedias para el año que viene.
No se sabe con claridad cuántos estudiantes transexuales hay en el sistema.
El Departamento de Educación de EEUU no mantiene estadísticas de ese tipo, y no se les pide a las escuelas que lo reporten.
Los padres de algunos niños transexuales temen que el rechazo social, el temor y la hostilidad podrían dar lugar a que alguien llame a alguna agencia de servicios, como el Departamento de Niños y Familias (DFC) de la Florida. Hay quienes temen que una queja de que alguien está mandando a un niño a la escuela vestido de niña pueda dar lugar a acusaciones de maltrato o negligencia.
Según dice Abbie Cuéllar, una abogada que se especializa en cuestiones de bienestar infantil, esos temores son realistas.
''Los padres deben asegurarse de que la documentación pertinente al hijo esté disponible y actualizada'', dice Cuéllar. ``La disforia de género está muy mal comprendida, y sólo haría falta que una persona ignorante, aunque bien intencionada, empezara a hacer llamadas''.
Pero Gary Gershowitz, un portavoz del DCF en Tallahassee, dice que los padres de hijos transexuales en la Florida no tienen nada que temer.
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(*1) Exacto!!!. Hasta hace bien poco también se encontraba la Homosexualidad, como un trastorno mental y/o una desviación sexual.
Te recomiendo ver la película "Ma vie en Rose" "Mi Vida en Rosa", que trata de la Transexualidad en la infancia.
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